Enseñar a describir no siempre se considera como una de las prioridades de la escuela; difícilmente se tiene en cuenta su complejidad y su contribución al crecimiento cognitivo, emotivo y ético de los alumnos. Parece que saber describir consiste en un simple ejercicio de enumeración de detalles, casi una capacidad elemental y banal.
Profundizar en este tema significa descubrir que, el saber captar y comunicar objetos, acontecimientos y emociones ?tal y como se presentan y no como quisiéramos que se presentaran?, es una actitud que no tiene nada de obvio, sino que estimula la capacidad crítica de la persona frente a un cierto realismo ingenuo.
En este libro, los autores ilustran los fundamentos teóricos de la operación mental de describir, sus implicaciones psicológicas, pedagógicas y sociales, ofreciendo una rica serie de estímulos para la praxis didáctica. Las actividades abarcan disciplinas diversas, habilidades transversales y diferentes lenguajes expresivos, con el objetivo de estimular en los alumnos su capacidad de interrogar y observar la realidad, establecer conexiones y expresar su propia experiencia de una manera ordenada y consciente.