La produccción, transporte y consumo de energía son quizá, las actividades humanas más lesivas para el medio ambiente: cambio climático, lluvias ácidas, mareas negras, residuos radiactivos, terribles accidentes como el de Chernobil, líneas de alta tensión en las que mueren miles de aves..., son algunos efectos. La energía es tremendamente venenosa, como se dice en este libro. Lo ideal es vivir consumiendo la menor cantidad de energía posible, porque la única que no contamina es la que no se consume. Pero la energía está muy unida hoy a nuestra calidad de vida y se hace imprescindible su consumo; por lo tanto, se trataría de reducir éste lo más posible y de usar fuentes menos lesivas para el medio ambiente. En este libro se repasan de forma muy pedagógica las propiedades y efectos de las diferentes fuentes de energías, ya sean tradicionales, ya alternativas. Leyendo el libro se entiende perfectamente la necesidad de un cambio drástico en el modelo energético sobre el que se basa la sociedad y se pueden conocer algunas fuentes alternativas de energía que podrían formar parte del nuevo modelo.
