Cathy tiene catorce años y vive con su madre. Aparece Bob, el nuevo novio de su madre, y todo cambia. Su madre ya no es la misma; ahora no hace más que intentar agradar a Bob constantemente, y también se enfada con Cathy con frecuencia. Y un día el mundo de Cathy se hunde de verdad. Bob la viola. Lo único que quiere ella es poder quitarse de encima su piel. Se lava muchas veces pero no es capaz de lavarse el dolor ni la culpabilidad que siente. Después, poco a poco, muy poco a poco, su ira sale a la superficie y ella empieza a resolverla... "Coherente estilísticamente y potente" The Times Literary Supplement