Juan Hervás regresa a su pueblo natal después de recibir la noticia de la muerte de Aurora Ventura, su amiga de infancia y amor de juventud. Aurora y un sobrino inválido a quien cuidaba han fallecido por emanaciones de gas. Juan se encuentra con ella en el cementerio y, como si fuese algo natural, inician un diálogo que nos revela su historia de amor, pero que también nos implica en otras historias, las que de niños les contaba doña Manolita, y en especial la de Adela, mujer del marqués Tomás Araujo y enamorada del ingeniero Jordi Monzó, soñadora y amante despechada, cuyo delirio quedará en la memoria de Aurora como una herencia enriquecedora y fatal. Esta es una novela sobre los poderes de la ensoñación y los desórdenes del amor, en la que Martín Garzo muestra su capacidad para iluminar desde una voz personal y espontánea temas universales como la pasión y el dolor. «Martín Garzo compone una novela envolvente y lírica, con ficciones dentro de la ficción, y genuino acento nostálgico...» Qué Leer