El juez Stafford ha sido envenenado con opio y el inspector Pitt es el encargado de investigar este crimen, asunto que cada vez se va haciendo más y más complejo, pues tropezará con una serie de tramas sentimentales entre sus amigos y conocidos, con las contradicciones de la justicia, con el antisemitismo latente en la sociedad victoriana y con las peculiaridades del mundo teatral. Y a medida que sigue investigando, el inspector Pitt irá recomponiendo una triste historia familiar. Es esta una emocionante historia de intriga que nos sumergirá de lleno en el Londres de la época victoriana y el ingenioso método detectivesco de nuestro protagonista. «Lectura obligatoria para todo adicto al suspense.»
El Periódico