El cadáver desnudo de una joven sin identificar aparece entre las ruinas de unos edificios bombardeados, sin ninguna pista acerca de quién puede ser el culpable. Para el inspector jefe Frank Stave, un hombre traumatizado por la guerra, que perdió a su mujer en un bombardeo y cuyo hijo lleva dos años desaparecido, se presenta un caso complicado; más cuando aparece el cadáver de un anciano en las mismas circunstancias. Entonces intuye que no será la última víctima. Con la ayuda de un oficial británico y de un compañero de la Brigada de Orden Público, se adentrará en una investigación que también pondrá en juego su propia salvación.