Un carácter tímido potencia nuestro atractivo, y a menudo es la clave para crear relaciones estables a cualquier edad. En este libro se identifican las siete caraterísticas innatas que favorece a las personas tímidas frente a los caracteres extrovertidos: sensibilidad, lealtad, capacidad de escuchar, reflexión, modestia, misterio y amabilidad.