El lema de Carlos V, Plus Oultre, ponía de manifiesto la voluntad regia de construir un imperio cristiano que desde Europa se extendiera hacia América, África y Tierra Santa. La divisa solar de Felipe II, Iam Illustrabit omnia, supone la culminación de este anhelo de la dominación universal. Desde el Renacimiento hasta el incio del siglo XIX, los reyes de España fueron representados en numerosas ocasiones mediante el Sol, expresión simbólica del orden universal impuesto por la monarquía hispánica.