IDEAS PARA SER FELIZ

La de la felicidad es una de las cuestiones que, en la actualidad, m225;s a menudo acapara el inter233;s de la mayor237;a de la gente. Posiblemente sea el tema de debate por excelencia.

Libros, art237;culos de prensa, tertulias y comentarios en radio, guiones y conversaciones entre amigos ofrecen a diario la posibilidad de reflexionar acerca de la felicidad desde distintas perspectivas. De ella hacen objeto y objetivo en sus actividades profesionales los pol237;ticos, economistas, escritores, fil243;sofos, predicadores y te243;logos, publicistas y vendedores.

Ha habido y hay grandes discrepancias en torno al concepto de la felicidad, y no es de extra241;ar. Todav237;a tiene vigencia el dicho de que cuando la felicidad nos sale al paso, jam225;s aparece tal como la hab237;amos imaginado.

As237;, cualquier reflexi243;n acerca de este tema conduce a la conclusi243;n de que no hay una 250;nica expresi243;n de felicidad, sino muchas. Tantas, casi, como personas felices o que pretenden serlo. Cada cual la hila, la teje y le da forma seg250;n sus necesidades, por lo que no es posible disfrutar de las de otros, como tampoco lo es querer vestir ropas ajenas. Pretender adoptar la felicidad de los dem225;s hace a la gente infeliz. Pero es este un bien que nos pertenece a todos, y nadie deber237;a verse privado de sus beneficios, ni temporal ni definitivamente.

La felicidad est225; a nuestro alcance, al de todos, sin excepci243;n. Nadie puede acapararla para s237; o para los suyos, ni en esta vida ni en la otra. Es muy barata, pues a ella se puede acceder sean cuales sean los bienes que se posean, los de la familia o los de la sociedad. Las acciones de la felicidad no cotizan en bolsa, y no por serlo ricos y pobres tendr225;n preferencia para disfrutar alg250;n d237;a de sus beneficios. No distingue con su favor ni a ricos ni a pobres, no se compra, no se vende. Como mucho, se merece, y no resulta pretensi243;n absurda afirmar que... 171;la felicidad es de quien la trabaja187;.

Para quienes firmamos este libro ser237;a una expresi243;n de felicidad haber contribuido a que el lector sea o desee ser m225;s feliz cuando termine su lectura.