Esta obra apuesta por la enseñanza de juegos de oposición, entendiendo que la oposición, la lucha y la competición, valores deformados por la sociedad actual, se pueden trabajar en la escuela a través de deportes minoritarios, lejos de la influencia de los deportes de masas.
La oposición es abordada desde tres deportes diferentes:
- Aprendemos a luchar.- se trabaja el equilibrio, la fuerza, la colaboración, etc. mediante juegos de uno contra uno, que poco a poco irán orientándose hacia la práctica de un deporte de lucha concreto: el judo.
- Aprendemos a jugar a bádminton.- busca el aprendizaje de gestos técnicos, movimientos y normas de este deporte a través de juegos de oposición-cooperación.
- Aprendemos a jugar con el frisbee.- se introduce en la escuela un instrumento de juego poco habitual: el disco volador. Con él se desarrollan nuevas técnicas deportivas y numerosas actividades.
El profesor podrá ayudar a sus alumnos a crear o descubrir en su clase y con sus propios compañeros los referentes necesarios para su educación, aumentar el conocimiento de sí mismos y de sus compañeros, crear en ellos actitudes de aceptación y de superación y estimular entre ellos los hábitos sociales de cooperación.
Por todo ello, esta obra pretende ir más allá del simple hecho de enseñar a luchar, jugar a bádminton y a jugar con el disco volador; pretende también aportar dentro del mundo de la educación física la estimulación de los valores educativos y de las actitudes sociales positivas.
