La diversidad cultural y lingüística ha ido penetrando en nuestras aulas como un auténtico fenómeno inesperado que obliga a los profesores a replantear las estrategias, los valores, las actitudes transmitidas. En este libro, el autor nos ofrece una serie de reflexiones imprescindibles para definir nuestros valores educativos en una situación multicultural, cuando se aspira a favorecer una integración de todos los alumnos procedentes de diferentes culturas, creyentes de distintas religiones y formados en valores familiares y en costumbres muy diversas