La vida del niño es un ejercicio de atención permanente al mundo que le rodea. Desde los primeros momentos de su vida debe centrarse en lo que está viendo u oyendo y en las tareas que debe realizar y no distraerse. Esta capacidad puede aprenderse y mejorarse con la práctica y el ejercicio, y el adulto puede desempeñar un papel fundamental en dicha mejora.
En esta obra se ofrece información a padres, profesores y especialistas sobre cómo fomentar la atención de los niños, especialmente durante los primeros seis años de vida. Se describen numerosas actividades, juegos y ejercicios mentales que el niño puede realizar con el adulto o con los compañeros y amigos, y estrategias concretas que el adulto debe tener en cuenta a la hora de estimularle y ayudarle. Uno de los capítulos se dedica a dar a conocer las particularidades que pueden presentar poblaciones con problemas específicos de atención, tales como el síndrome de Down o el trastorno por déficit atencional.