En lo que hace al contencioso político vasco, el autor sostiene que tanto el Derecho como la propia sociedad reclaman profundizar en la democracia real y en la consulta abierta de las cuestiones constitucionales que afectan al País Vasco. Según la tesis que desarrolla el presente libro, ni el ordenamiento jurídico ni el todavía incipiente desarrollo constitucional europeo suponen freno alguno a la profundización de la democracia en los distintos contextos territoriales. Al contrario, una eventual Europa constitucional aceptará razonablemente toda fórmula jurídica y política que busque la resolución de los conflictos y la mayor garantía posible de los derechos de los ciudadanos, tanto individualmente considerados como en su vertiente colectiva. De hecho, el autor considera que derechos individuales y colectivos no son sino las dos caras de una misma moneda. El libro viene prologado por Miguel Herrero de Miñón.