A la sombra del conflicto cainita de 1936-1939, las Guerras Carlistas fueron los conflictos bélicos más decisivos de la España del siglo XIX. Liberales y carlistas se enfrentaron en tres emocionantes ocasiones para imponer sus diferentes fórmulas políticas y estilos de vida.
La Primera Guerra Carlista, también llamada Guerra de los Siete Años (1833-1840), fue una verdadera guerra civil que asoló toda España, llegando a altas cotas de violencia, ya que sólo los muertos del ejército liberal supusieron la suma de todos los fallecidos en los dos bandos de la Guerra de 1936. Los carlistas ?pese a un innegable apoyo de parte de la sociedad española- fueron finalmente derrotados, aunque muchos de ellos consideraron que la partida había finalizado en tablas.
Tras un breve paréntesis, partidas carlistas se alzaron en Cataluña, extendiéndose el conflicto nuevamente el noreste peninsular, bajo el liderazgo militar del mítico general Ramón Cabrera, el Tigre del Maestrazgo. Sin embargo, la guerra de los Matiners (1846-1849) supuso una nueva derrota para las banderas de don Carlos, fracasando otras conspiraciones e intentonas militares en el resto de España.
Y cuando toda la clase política europea consideraba muerta la causa legitimista, la crisis del Estado liberal y el triunfo de la revolución de 1868 otorgaron nuevas fuerzas a ?los cruzados de la Causa?. La Tercera Guerra Carlista (1872-1876) volvió a poner en jaque a la España liberal, que vio -frente a su baile de regímenes políticos, ministros y generales- a sus enemigos unidos bajo el liderazgo de un joven Carlos VII. Las batallas se sucedieron y los soldados carlistas volvieron a ser vencidos, mientras su rey cruzaba la frontera.
La España liberal asentó definitivamente sus pilares, pero, tras un largo período de paz, la proclamación de la Segunda República fue un catalizador para que las dormidas huestes carlistas emergieran de su letargo y se prepararan para participar en un nuevo conflicto: la Guerra Civil Española.
El presente libro analiza los uniformes, banderas y armas de los diferentes ejércitos, la evolución de la estrategia, la vida de los soldados y oficiales, las repercusiones internacionales, los apoyos sociales y el papel de las elites de ambos bandos a lo largo de los siglos XIX y XX, sin olvidar el singular impacto de las Guerras Carlistas en el cine español.