La Leyenda Negra de España tiene sin duda profundas raíces en la Leyenda Negra de la Inquisición. Desde la mitad del siglo XVI aparecen textos de intelectuales que describen una imagen de la Inquisición que exacerba sus rasgos negativos con fines propagandísticos. El inglés John Foxe, en su obra The Book of Martyrs, fue uno de los precursores. Una de las fuentes más decisivas fue Sanctae Inquisitionis Hispanicae Artes, firmada bajo seudónimo y probablemente escrita por dos protestantes españoles exiliados, Casiodoro de Reina y Antonio del Corro. Este libro, traducido al inglés, francés, holandés, alemán y húngaro, contribuyó a cimentar la imagen negativa que en Europa se tenía de la Inquisición. Holandeses e ingleses, rivales políticos de España, fomentaron también esa especie. Cuando parecía que todo se había dicho sobre el tema, irrumpe en los años noventa Benzion Netanyahu (historiador y ex político sionista, padre del primer ministro de Israel) con un duro y prolijo tratado en el que señala al racismo antisemita como origen y motor fundamental del Santo Oficio en España. Su polémico texto ha tenido una inmensa —y casi acrítica— repercusión internacional, y hasta el Papa Benedicto XVI confesó en mayo de 2009 al primer ministro Benjamin haberlo leído. La obra que el lector tiene en sus manos es la primera refutación completa y fundada que se hace de las tesis de Netanyahu, así como de otros autores que han seguido la estela del vehemente hispanista israelí. Escrita con un lenguaje directo y actual, se deja leer por todos sin perder por ello un ápice de su rigor científico.