«El Tantra dice: Acepta lo que eres. Eres un gran misterio y muchas energías multidimensionales. Acéptalo, y con cada energía muévete con profunda sensibilidad, con conciencia, con amor, con comprensión. ¡Muévete con ello!
Entonces cada deseo se convierte en un vehículo para ir más allá. Entonces cada energía es una ayuda. Entonces este mundo es divino, este cuerpo se convierte en un templo, un templo sagrado, un lugar sagrado.»
«El Tantra cree en tu bondad interna. El Tantra dice que todo el mundo nace bueno, que la bondad es tu naturaleza. ¡Ya eres bueno! Necesitas un crecimiento natural, no necesitas ninguna imposición externa; por eso considera que nada es malo. Si hay enfado, sexo, avaricia, el Tantra dice que esos estados también son buenos.
Lo que ocurre es que no estás centrado en ti mismo.
Por eso no puedes utilizarlos.
Si estás presente ahí, dentro, la ira se convierte en una energía saludable?, se vuelve buena.
Todo lo que hay es bueno. Todo es sagrado; nada es malo. Para el Tantra no existe el mal; sólo divina existencia.
El Tantra dice que la transformación viene cuando aceptas tu ser total. Entonces, de repente, todo se alinea, todo toma su lugar. Entonces, sin intentar cortar nada de tu ser, éste se reordena. Si aceptas y dices sí, se produce un reordenamiento, y donde antes sólo había un clamor, ahora nace una melodía, una hermosa música.»