Este volumen analiza el arte de la pintura y de la escultura después de la Edad Media: las nuevas formaciones sociales y su relación con las artes (mecenazgo, encargos) y los grandes movimientos de este periodo (Manierismo, Contrarreforma). Se da en el texto una importancia decisiva a una explicación de esta práctica desde el punto de vista de la teoría, para de ahí pasar a un despiece formal y temático de la misma e insertarla en los procesos y dinámicas sociales. Por otra parte, como el libro quiere dar una importancia capital a la «historia del arte como historia del gusto», se hace especial hincapié en fiestas y decoraciones efímeras, palacios, jardines, coleccionismo, etc.