Desde Sócrates hasta los pensadores de la posmodernidad, pasando por los románticos alemanes, la ironía fascina tanto a los creadores como a los filósofos. Como burla o broma circunstancial o como disposición particular de los hechos de forma malévola, el término ironía se aplica a un gran número de fenómenos y situaciones. Recurso frecuente en la conversación cotidiana, la ironía nos resulta natural a todos.
Si bien esa familiaridad explica el éxito de su práctica en los diferentes terrenos artísticos y el uso de su palabra en el discurso de las ciencias humanas, también nos lleva a pasar por alto las grandes tradiciones de las que la ironía es deudora. Son esencialmente tres a las que este libro pasa revista: la concepción antigua, la concepción romántica y las distintas concepciones modernistas. Tres breves ensayos inéditos ?de Linda Hutcheon, Candance Lang y Joseph Dane? completan la reflexión, proporcionando perspectivas a veces insospechadas.