El deseo de llegar más allá, de trascender la materia propia de un arte para acoger los materiales de otro, es un rasgo que vincula a poetas, pintores y escultores; es el impulso común del acto creador. Este libro ofrece una reflexión acerca de los fundamentos teóricos de tales transiciones, y aporta algunos datos para iluminar las interconexiones y complicidades en la poesía y el arte contemporáneos. El análisis se centra en la obra de autores tan imprescindibles como Joan Brossa, Jaume Plensa y Nicanor Parra, último premio Cervantes. El mayor logro del arte de los poetas, Brossa y Parra, radica, sobre todo, en el sólido soporte que supone una concepción poética que encuentra su expresión en los procedimientos de las artes visuales. Algo parecido ocurre en el arte de Plensa: su mayor riqueza consiste en haber sabido aplicar a su trabajo escultórico unos mecanismos que se alimentan en la literatura.La investigación contempla también la obra de autores que guardan relaciones de proximidad y parentesco con los señalados. Podemos nombrar, entre otros, a René Magritte, Marcel Duchamp, Joan Miró, Jorge Molder, Eduardo Chillida o Charles Sandison, y, desde luego, a poetas que se han aproximado a las distintas formulaciones de visualidad en la poesía, como ocurre, por ejemplo, con Felipe Boso, Francisco Pino, William Carlos Williams, Bertold Brecht, Juan Eduardo Cirlot, Rafael Alberti, Bartolomé Ferrando, Eduardo Fraile, Octavio Paz, José Miguel Ullán, o Severo Sarduy. Esta aproximación permite ampliar el diálogo que entre sí entablan tanto las artes cuanto las distintas transgresiones que operan en la conjunción de palabras e imágenes.