Este ensayo aborda la figura de María Zambrano a partir de su relación con los poetas de su tiempo, fundamentalmente de la generación del 27. Siguiendo una trayectoria biográfica que parte desde los años de formación hasta la elaboración de sus obras de madurez como Pensamiento y poesía en la vida española o Filosofía y poesía, ambas de 1939, se analizan los referentes poéticos que formaron esos contextos y que influyen en la génesis de la llamada ?razón poética?. Se presentan así las relaciones de amistad y puntos de encuentro entre María Zambrano y poetas como José Bergamín, Luis Cernuda o Miguel Hernández, entre otros. Escenarios fundamentales como el ambiente poético de Segovia en sus años de juventud con figuras tutelares como su padre, Blas Zambrano o Antonio Machado, o durante la guerra civil, la participación de la pensadora en una revista excepcional como Hora de España. De todo el horizonte poético que conoció María Zambrano entre los últimos años veinte, la guerra civil y el comienzo del exilio, la figura de Emilio Prados merece una atención especial. Es Emilio Prados el poeta cuya obra presenta una mayor afinidad con el pensamiento de María Zambrano, y a la reconstrucción de ese diálogo y sintonía se dedica la mayor parte del estudio. A través del análisis de los poemas que María Zambrano marcó en los libros de Emilio Prados, de los textos que escribió sobre el poeta y de las circunstancias biográficas de ambos se presenta una realización efectiva del diálogo entre la filosofía y la poesía como el que siempre reclamó la autora en sus propias obras. El recorrido por estas figuras ofrece la suficiente documentación como para ubicar el pensamiento de María Zambrano en un contexto poético específico al que se puede atender como una de las fuentes de explicación de la originalidad de su filosofía poética.