Los más de cincuenta autores y cien relatos
que configuran esta Antología española de literatura
fantástica --la antología temática más
completa y ambiciosa realizada hasta la fecha-- pretenden alumbrar hacia
un brumoso mundo de sueños forjados en el trastero de nuestras letras,
que no ha sido pródiga en fabulaciones fantásticas... tal
vez porque al español no le ha bastado imaginar mundos fantásticos,
sino que ha necesitado también vivirlos; y lo que llevó en
1605 a un hidalgo aburrido a combatir lanza en ristre frente a unos molinos,
no fue tanto la locura o los libros como la necesidad imperiosa de buscar,
lejos del mezquino rincón, un horizonte más noble a su mirada...
el mismo horizonte que, un siglo atrás, había impulsado hacia
la quimera de América a los soberbios vagabundos que un día
dejaron su patria por el mar. De los autores, veintiuno corresponden al
periodo que va desde el siglo XIII al XIX, y treinta al XX, dado que el
verdadero desarrollo del género pertenece a los últimos tiempos.
Junto a relatos estrictamente fantásticos
que suponen una agresión a la realidad --según la idea de
Roger Caillois--, se incluyen otros, siguiendo un criterio más amplio,
relativos a sueños, metamorfosis o animales fabulosos y en general
al mundo mágico que convive cómodamente con ella.