Aparecida en 1894, fue la última novela que Stevenson
publicó en vida, pues en el mes de diciembre de ese mismo año
el autor de La isla del tesoro moría en Apia, capital de
Samoa, a los cuarenta y cuatro años, al final de una larga y penosa
enfermedad. El relato comienza con el encuentro en una playa de Papeete,
capital de Tahití, de tres náufragos del destino, tres personajes
heterogéneos, dignos representantes de otros tantos tipos sociales,
a los que sólo une su situación desesperada: Herrick, licenciado
por la Universidad de Oxford; Davis, capitán de la marina mercante
en paro, y Huish, un anodino empleado londinense. Todos ellos han sido
desterrados de su patria por diferentes motivos y se encuentran lejos de
ella, en el último peldaño de la degradación y el
abandono, cuando un rayo de luz viene a iluminar su negro futuro: la compañía
de la goleta Farallone busca tripulación para transportar
un cargamento de champán a Sidney. Durante el viaje irá saliendo
a la luz el verdadero carácter, e incluso identidad, de los tres
expatriados, y la travesía tomará un imprevisto derrotero...