«"La carga de la brigada ligera" resume mi solitario deseo durante años como escritor: escribir las páginas que me gustaría leer y disfrutar, narrar historias con las dosis adecuadas de desaliento, acción, cinismo, amenaza, ternura y sensualidad, un modo indirecto de encarar la vida, de verla a través de comportamientos, de movimientos, de entreverla a través de gestos y miradas, sin llegar a explicar nada absolutamente, para que el lector ponga sus ojos en esta otra parte de la historia que se esconde tras el vaho de la anécdota. Las historias están dentro de bloques de ámbar, contenidas en su espesor y retenidas en el tiempo como fotografías veladas» (Gonzalo Calcedo Juanes)