Con su ingenio y encanto habituales, Mark Twain 1835-1910), uno de los más grandes escritores denuestro tiempo, nos presenta la historia del Jarín del Edén. He aquí los divertidos y amenos diaios de Adán, el padre legendario, y Eva, la madr de la raza humana. Las relaciones entre el sexofemenino y el masculino ¿han sido siempre las mimas? Twain nos responde a esta preguntaresentndonos a nuestro padre Adán constantemente imporunado por la curiosidad de su compañera hembra qe, con su naturaleza inquisitiva y su practicida y sagaz modo de ver cuanto le rodea, pone e impne nombre a todos los lugares, seres y animales el jardín. Es Eva quien descubre" (antes que sucompañero) no sólo el fuego o el humo sino tambin sentimientos tan universales como el amor, el olor y la belleza de las cosas... También, claroestá, el amor y la atracción hacia su gandul y aveces tosco compañero que no tiene otro remedio ue llegar a una única y posible conclusión: "all donde estaba ella, estaba elaraíso". Twan nos rememora así el conmovedor y secular mito el paraíso o jardín del Edén utilizando de modo agistral el humor, el sarcasmo, la inteligencia ncisiva y unos sutiles toques de patetismo para ostrarnos las ancestrales debilidades y modos deser de la naturaleza humana."