La multiplicación de instituciones artísticas y la gran abundancia de creaciones de todo tipo y condición son dos fenómenos interrelacionados que influyen en el panorama artístico contemporáneo. Es tal la riqueza y diversidad de propuestas que no parece fácil distinguir entre ellas algunas líneas predominantes. Por otra parte, parece evidente que abundan los artistas con voluntad de ocupar determinados espacios ideológicos, técnicos o institucionales, es decir, de tomar posiciones claras en un universo inestable y muy complejo. Dos preguntas surgen inmediatamente: ¿Está sustituyendo la " voluntad de tendencias " a la " tendencia artística? ¿Esta dinámica se ha visto impulsada por el desplazamiento del mercado por la iniciativa institucional en la última década?
A través de la observación de críticos, creadores e historiadores del arte, este libro pretende responder a estas preguntas, que aunque no son fáciles de contestar, tampoco parece posible evitar.