Las Islas Felices, un archipiélago aislado de nuestro mundo por una barrera de vientos, es el único lugar del planeta donde todos sus habitantes ?animales, plantas y seres humanos? son felices y viven en completa armonía. Allí se puede esquiar sobre pistas de azúcar, remar en un lago de limonada y ver cumplidos los más anhelados sueños. El capitán Davorín Madirankovitsch tuvo la suerte de poder visitar en dos ocasiones este maravilloso archipiélago en compañía de un grupo de amigos, y con ellos disfrutó de las maravillas que ofrecen las islas y que ahora relata en este libro.