París, en el duro invierno de 1910. Maud Heighton sueña con ser pintora. Estudia en la selecta Academia Lafond, pero mientras que los que la rodean disfrutan de los placeres de la Belle Époque, Maud ve cómo su situación económica se deteriora. Todo parece mejorar cuando consigue un trabajo bien remunerado: acompañar e iniciar en la pintura a Sylvie Morel, una inglesa de situación acomodada que vive con su hermano Christian. Sin embargo, todo se desmorona cuando los Morel son acusados de impostores y ladrones, y la propia Maud es imputada en el robo de unas joyas.