Con el telón de fondo de una guerra apenas evocada, un hombre y una mujer, dos jóvenes, se conocen una mañana. Los amantes se instalan lejos de la ciudad, en el campo, donde todo recuerda al paraíso perdido. Su amor, hecho tanto de exceso como de angustia, de contemplación como de éxtasis, es el contrapunto a la tragedia histórica y la única fuerza subversiva en medio de la violencia. Los dos cuerpos son conscientes de su vulnerabilidad, pero también de su poder tanto redentor como creador.
Inédita hasta ser recuperada en Francia hace tres años, como ya hemos señalado, esta novela corta de Legrand cuenta en nuestra edición con un anexo de gran interés: un pequeño artículo publicado en 1942 (titulado «Nacimiento del amor») que arroja una luz muy especial sobre Doble fuga de amor y muerte: sensualidad y asombro.
A pesar de su brevedad, este volumen está lleno, sin embargo, de exigencia y de placer para el lector. Creemos que son doblemente esenciales estas páginas, testamento de un autor mítico que aún estaba por descubrir en nuestra lengua.