Una noche, mientras cuelga patas arriba como cada noche, nuestro héroe decide que quiere ser especial… ¡y convertirse en Supermurci! Pronto se da cuenta de que es más difícil de lo que parece. Todos los murciélagos tienen un agudo sentido del oído. Todos pueden volar. Y todos pueden orientarse en la oscuridad. Comienza a pensar que nunca conseguirá ser especial, hasta que una familia de ratones descubre que en realidad ¡es un héroe!
Una emotiva y divertida historia, maravillosamente ilustrada por un genial nuevo talento, Matt Carr.