Este relato parte del éxito extraordinario que en el siglo XVI obtuvo la Historia del Gran Reino de la China, de fray Juan González de Mendoza, que alcanzó treinta ediciones y fue traducida a varios idiomas. El origen de esta obra se remonta al tiempo en que Felipe II, señor ya de un imperio que iba desde los dominios españoles en América hasta la India portuguesa, encargó a religiosos agustinos que se encontraran con el emperador de China y acordaran una alianza que debía convertir el Celeste Imperio en un paraíso cristiano bajo su protección. Para llevar a cabo la misión, González de Mendoza realizó una ingente labor de acopio de noticias sobre historia, geografía y tradiciones que le permitieran conocer la sofisticada complejidad de la civilización china. Con el presente libro, Diego Sola no solo reconstruye la biografía de González de Mendoza, que descubrió a Occidente cómo eran China y sus habitantes, sino que recupera la notable influencia que ejerció en los escritores españoles y europeos de su generación.