Obra negra reúne algunos de los textos de Gonzalo Arango, líder del nadaísmo, movimiento constituido en los años 60 como oposición literaria y filosófica al ambiente cultural establecido por la academia, la iglesia y la tradición. Este grupo tomó como respaldo a Mallarmé, Sartre, Breton, Kierkegaard, Kafka, Miller y Gide, entre otros, y estuvo emparentado con movimientos vanguardistas que se gestaron de forma paralela en América latina y Europa.
La presente edición vuelve a poner en juego la actualidad de uno de los escritores más importantes del siglo xx en Colombia, dejando entrever el nihilismo de Arango, su deleite con la muerte, su fascinación por el aniquilamiento, al igual que su desesperada creencia en la vida. En los cuentos reunidos en «Prosas para leer en la silla eléctrica» los textos pasan de la necrofagia de cocinar con sangre-manteca y del anhelo de presenciar la tortura de un genocida, al intento por comprender las condiciones sociales que llevaron a los bandoleros a convertirse en seres despiadados, confesando su inocencia pero sin dejar de celebrar su muerte.
En el «Testamento» de Obra negra, Arango fue contundente al afirmar que no debía ser tomado en cuenta como un literato ni mucho menos como un intelectual. Después de su muerte aspiraba a pasar desapercibido, estar condenado al olvido o, cuando menos, a ser odiado con furor. Esta antología, elaborada por Jotamario Arbeláez, hace un recorrido por los textos nadaístas del autor e incluye los manifiestos, cuentos, cartas y poemas más representativos de Arango.
«Más allá del nadaísmo, que, como todo ismo, nació con una fecha de caducidad efímera, buena parte de la obra de Gonzalo Arango perdurará por ser portadora de dos hazañas poco frecuentes en nuestra literatura: haber conciliado en un mismo discurso poesía y pensamiento y ofrecer una de las más altas prosas de la literatura colombiana del siglo xx.» Dasso Saldívar (biógrafo de Gabriel García Márqu