La industria de los vientres de alquiler es un lucrativo negocio de alcance mundial que ha sabido atender a la presión social o el deseo individual de tener descendencia propia. Así, es reclamado hoy por las posturas que lo defienden como un “derecho” y una alternativa a la infertilidad. Los argumentarios a favor o en contra de esta nueva y sofisticada práctica de reproducción requieren una reflexión sosegada y contrastada como la que ofrece Laura Nuño en este libro. En él da cuenta de sus implicaciones ético-políticas en aspectos tan importantes como la justicia social, la igualdad de género, las brechas sociales por la selección genética, el interés superior del menor, los límites del mercado o el afán de esta industria por conciliar el lucro con la retórica del altruismo.