Benjamin Blake es un taxista que conoce muy bien la ciudad de Memoria. Un día, recoge a alguien que olvida en el asiento trasero del coche un maletín que cambiará su vida al entender que él y todos los ciudadanos de Memoria son extras en un mundo virtual. Esta ciudad que no existe, una Nueva York en la década de 1930, es ofrecida como destino por la compañía Brainstorm, un lugar que permite a los turistas satisfacer sus deseos más vergonzosos con la mayor impunidad. Pero detrás del escenario está la sombra de un monstruo digital. La reedición de Memoria, que cobra nueva vida veinte años después en un solo álbum, fue publicada originalmente en 1999 y nos presenta un tema que ha resistido la prueba del tiempo y fue publicado el mismo año del estreno de Matrix como Le naufragé de Memoria.
Es un relato potente adelantado a su tiempo. La realidad virtual como tema acompaña a una trama inteligente que no decae en ningún momento. Su calidad gráfica incuestionable en parte a color, en parte en blanco y negro, es el marco de una narrativa frenética, una mirada distópica despiadada al capitalismo y al consumo desenfrenado de fantasías y sensaciones. Un libro muy interesante para amantes de Matrix y Westworld.
