Es algo excepcional poder contemplar la obra de Tàpies integrada en el caserío Zabalaga (Museo Chillida Leku). Este libro deja constancia de la primera exposición de un artista invitado al caserío Zabalaga de Hernani, ya que, hasta el momento, nunca antes se había expuesto obra de otro artista que no fuera Eduardo Chillda en este espacio. Esta exposición rinde homenaje a Antoni Tàpies a través de una selección de obras que muestran su constante exploración de las propiedades expresivas de los materiales. La trayectoria tanto personal como artística de ambos artistas tienen muchas semejanzas, por lo que el diálogo Chillida-Tàpies en este singular espacio rodeado de naturaleza crea imágenes armónicas y de gran equilibrio, donde el blanco, el negro y los tonos tierra toman protagonismo.