A mediados de la década de 1930, W. B. Yeats recogió en un solo tomo, con el nombre de Autobiografías, seis textos escritos en diferentes épocas. Constituyen unas memorias que abarcan sus primeros 58 años de vida, desde su infancia hasta el momento en el que obtuvo el Premio Nobel de Literatura. En ellas ofrece su opinión sobre personajes destacados de su época, como Oscar Wilde, George Bernard Shaw o los pintores prerrafaelitas, y de otras anteriores como Percy B. Shelley. Aanaliza también su propia obra como poeta y dramaturgo, relata sus esfuerzos por fundar el famoso teatro Abbey de Dublín y se detiene en su relación con el nacionalismo irlandés y la fascinación que llegó a sentir por el ocultismo y las visiones paranormales.