Desde los años ochenta, el sida y el VIH no solo han formado parte del panorama social, científico o político de España e Hispanoamérica, sino que también han impactado muy directamente en la órbita cultural. La razón es sencilla: una pandemia de sus dimensiones y características se emplazó en una encrucijada a la que los creadores y creadoras no pudieron sustraerse, ya fuera porque les afectara personalmente, ya fuera por un compromiso ético. A lo largo de estas décadas, la literatura, las artes plásticas y escénicas o los géneros audiovisuales han ofrecido testimonios del dolor y de la rabia, convirtiéndose en agentes críticos que han despertado conciencias y acompañado múltiples activismos. El presente volumen tiene como objetivo ofrecer una nueva aproximación de conjunto que ubique estos discursos y estas representaciones al tiempo que contextualiza creaciones y recepciones. De la mano de un grupo internacional de investigadores, su propósito es valorar las significaciones tempranas y presentes de una epidemia que puede ser considerada protagonista de una época, así como vía de reapropiación política de