La magia del lugar y del tiempo, del ser y del estar. Fiel a su estilo inclasificable, Montero Glez traza en estas páginas un delicioso libro de viajes físico y temporal a lo largo y ancho de un Sur emocional. Con una prosa rica y ágil, combina elementos tan dispares como inesperados: Cádiz, Hércules, Camarón de la Isla, Tánger, Quiñones, Sevilla,
Kiko Veneno, los monos de Gibraltar, Ceesepe, la Venta de Vargas y del Ventorrillo, Paul Bowles, Rancapino, la grifa, Caracol, García Lorca…
Esta obra fue galardonada con el Premio Llanes de Viajes 2012, y una década después la recuperamos, en una edición revisada por el autor y con un prologuista de excepción. En ella, Glez propone un viaje hacia parajes emocionales inesperados, rebosantes de música e imágenes luminosas.