En el pasado la razón de ser del líder se basaba, casi exclusivamente, en satisfacer las necesidades de los accionistas de su empresa. Ello provocaba frecuentes conflictos con otros grupos de interés: empleados, proveedores, clientes y comunidad. Con frecuencia el liderazgo se convertía en un ejercicio de poder. Aunque el conflicto de intereses entre las partes perdure, inevitablemente, las empresas del s. XXI deben gestionarse bajo estrictos principios de legalidad, sostenibilidad, tolerancia, respeto y eficacia. Ello obliga a los líderes de las organizaciones a encontrar el adecuado equilibrio y consenso entre los intereses de las diferentes partes.
¿Qué mueve finalmente a un accionista, un cazatalentos o un consejero a la hora de seleccionar al máximo responsable de una entidad? ¿Qué valora realmente un director general a la hora de confirmar en su puesto a un miembro de su equipo directivo?... En definitiva, ¿qué cualidades personales tienen más peso en los diferentes grupos de interés a la hora de valorar el desempeño de un profesional de alto nivel en una organización?
?Liderazgo Basal es uno de los libros más potentes de liderazgo que he leído a lo largo de mi vida y refleja la amplia experiencia de mi Amigo en temas de dirección de personas?
Cosimo Chiesa
Profesor Extraordinario del IESE Business School