Carolina viaja a Zúrich para pasar unas vacaciones con su tía. Allí conoce a Valentín, con el que enseguida conecta porque ambos se encuentran en momentos vitales similares. Cuando se sumergen en el lago para recuperar un objeto perdido, lo que no esperan es encontrar una misteriosa cabeza de bronce. Así, comienzan una investigación que los llevará a varios rincones de la ciudad, a los Alpes y al pasado de una persona muy cercana para los dos.
Una historia de intriga y amor, que defiende el respeto a la naturaleza y el arte, y descubre a los lectores los secretos de la obra del escultor Rodin y su misteriosa relación con la Divina comedia de Dante.