Querido lector, tienes en tus manos un texto de filosofía escrita por un médico de profesión, pero interesado en estos temas desde su juventud. En este campo me han inquietado varias cosas: la pluralidad de ideas sobre los mismos temas, la facilidad con que son desplazadas injustamente unas tesis en favor de otras; el carácter críptico de muchos textos filosóficos, con afirmaciones raramente ejemplificadas, escasamente razonadas y con frecuente presencia de encubiertas falacias; de presentar como nuevo un cambio de ropajes de cosas ya dichas.Pienso que en la aspiración al conocimiento y en sus exigencias, el filósofo peca, ora por defecto, ora por exceso. Frente a ello, este autor modestamente pretende: El uso de unos criterios realistas de carácter, en gran medida, aristotélico para fundamentar y valorar las ideas. Poner en valor las distintas vías de acceso al conocimiento, así como desvelar estrategias de engaño y manipulación. Una ponderación de carácter crítico, con un posicionamiento personal razonado, sobre grandes temas como el conocimiento, el escepticismo, el materialismo, el dualismo, las visiones sobre el mundo, la vida, el alma, el teísmo, el pensamiento en la post modernidad y en la postverdad, y el misterio del hombre.Desearía que la lectura de este libro constituyera un tónico para tu salud intelectual y crítica.